Foto de cuatro de los viajeros peninsulares que llegarán a Melilla para vivir su interesante iniciativa.- Son Hilario, Isaac, Luis y Javi, que llegarán junto con Cayetano a la ciudad el próximo 11 de agosto
Ya ha pasado tiempo desde aquella impostura y ahora Luis ha decidido reparar la cuestión, repararse, hacernos pensar a quienes pudiésemos caer en una práctica semejante. Nunca es tarde a no ser cuando es demasiado tarde, y todavía no lo es. De ahí que, cuando pensábamos conjuntamente en qué hacer este verano con nuestras vidas, él propusiera un viaje a Melilla para comenzar allí un nuevo tipo de turismo, más activo, más sincero, desplegando en él cuanto la tecnología pone a nuestro alcance, para ver hasta dónde se podía llegar. Íbamos a aunar fuerzas, las fuerzas de la escritura y el cine, en busca de un objetivo común. Yo (Hilario J. Rodríguez) dije que sí enseguida, quizás porque siempre me han gustado las películas de espías tipo Misión imposible y porque vivo en una ciudad (Guadalajara, no en la de Jalisco sino en la de Castilla-La Mancha) donde me gustaría formar una plataforma ciudadana que se llame POSIBLE. Lo malo es que nuestro ejército era tan pequeñito que difícilmente seríamos capaces de llevar a cabo la empresa sólo por nosotros mismos. Fue entonces cuando apareció Francisco Javier Díez López, alias Javi, un profesor de Medios Informáticos experto en experimentos sonoros, que se decidió a acompañarnos para registrar los sonidos de Melilla: los del silencio en la antigua vía férrea, los de los camiones de recogida de basuras, los de la animación juvenil en los pubs de moda y de las conversaciones en las terrazas del Barrio Real, los de las llamadas del muecín o almuédano, y en general lo de cuanto se ponga a nuestro alcance. Después de él vino Isaac Begoña Ortiz (cuyo nombre yo pronuncio “Aisac” porque nos conocimos en Chicago y porque ya nunca me he acostumbrado a pronunciar en correcto castellano), un fotógrafo, ajedrecista y DJ ocasional con quien el tiempo se pasa más aprisa y mejor porque es de esos amigos que nunca te fallan y que continuamente añaden sugerencias, mejoran tus ideas y te contagian su buen estado de ánimo (en fin, que es cualquier cosa menos un coñazo). Y, por último, incorporamos al grupo a Cayetano Vela López, un mago, un experto en trucos que sabe engañar a la vida con sus cartas sacadas de la manga y con su chistera, dispuesto esta vez a interactuar con los melillenses, proporcionando un poquito de esa felicidad que a menudo resulta tan elusiva.
Filmaremos, entrevistaremos, fotografiaremos, entretendremos, grabaremos y escribiremos hasta el límite de nuestras fuerzas. El día 10 salimos de Guadalajara a las seis de la mañana y llegaremos a Melilla a las 11 de la noche. A partir de ese momento, la ciudad estará a nuestra disposición y nosotros estaremos a disposición de la ciudad.
Hemos abierto un blog en el que iremos colgando todos los materiales (de hecho, ya hemos comenzado a colgar cosas):
En él, aceptaremos vuestras sugerencias y os propondremos que sigáis nuestra aventura, que no es otra que dar forma a lo que desde aquí parece «tan lejos, tan cerca».